Los uniformados, con el apoyo de la Oficina Municipal de Seguridad Pública, realizaron la inspección de los vehículos, furgones y autobuses, para garantizar que cumplan con lo establecido por el Ministerio de Transportes, con el propósito de garantizar un buen servicio para los niños de Requínoa.
La vuelta de las clases presenciales trajo consigo el retorno de los populares furgones amarillos a las calles de la comuna, medio de transporte más requerido por los apoderados para el traslado de los alumnos, principalmente aquellos que se desplazan desde las zonas rurales hasta los establecimientos ubicados en el sector céntrico.
En la jornada estuvo presente el teniente Pablo Fuentes de la Subcomisaría de Carabineros de Requínoa, quien conversó con los transportistas para aclarar sus dudas y entregó consejos que favorezcan la convivencia vial en las calles de la comuna, sobre todo en los horarios peak donde se generan tacos y escasean los estacionamientos.
Al finalizar la fiscalización, la gran mayoría de los vehículos aprobó la revisión y recibió un sticker, que fue pegado en el frontis de cada furgón y autobús, a modo de acreditar de forma simbólica que cuentan con la aprobación para el correcto transporte de los estudiantes.
