Las alternativas propuestas contemplan una “ciclocalle” que parte desde la Plaza de Armas, con un trayecto que va por las rutas céntricas Guillermo Shell, Caupolicán, Leonardo Murialdo y Av. El Abra para empalmar con la nueva ciclovia proyectada por el MOP, que va desde el cruce el Abra hasta el Cruce de Olivar, con una extensión aproximada de 3.7 km y 5.8 km respectivamente.
Franco Illesca, arquitecto y contraparte municipal del proyecto, explica que “la presente iniciativa va enfocada en proyectar y mejorar la ciclovia existente en Av. El Abra, para la cual se contemplan los nuevos estándares, principalmente ligados a la ley de convivencia vial actual, que entrega mejores condiciones a quienes utilizan diariamente la bicicleta como medio de transporte”.
De esta forma, el análisis realizado por tramo, contemplaría los siguientes cambios. Calle Guillermo Shell: Este lugar cuenta con un perfil de calzada (ancho) aproximado de 6 metros unidireccional, por lo cual es conveniente proyectar la ciclovía en la calzada (ciclocalle), ya que el perfil es suficiente y adecuado para la circulación conjunta de los vehículos motorizados y ciclistas.
Calle Caupolicán: En este tramo nos encontramos actualmente con un perfil de calzada aproximado de 6 metros (ancho) unidireccional, por lo cual también es conveniente proyectar la ciclovía en calzada (ciclocalle), ya que el perfil es suficiente y adecuado para que los vehículos motorizados puedan circular de buena forma.
Calle Leonardo Murialdo: Acá existe un perfil de calzada aproximado de 7 metros (ancho) bidireccional, por lo cual es conveniente proyectar la ciclovía al costado sur de la vía (ciclocalle), ya que el perfil es suficiente y adecuado para la circulación de los vehículos en ambas direcciones.
Av. El Abra: En este tramo nos encontramos con una calzada con un perfil aproximado de 7 metros (ancho) bidireccional, donde se encuentra una ciclovía existente, la cual se intervendrá en su totalidad con los nuevos estándares de ciclovía y la ley de convivencia vial. Esta se encuentra al costado sur de la avenida y cuenta con un perfil de 2 metros (ancho) aproximado, con una longitud de 3.1 km.
Dentro de las problemáticas detectas en este estudio, las más habituales son; la interferencia entre los distintos usuarios, automovilistas, ciclistas y peatones al carecer de espacios exclusivos; la mala iluminación en todo el tramo; la presencia de poblaciones, empresas y servicios públicos, que motivan los cruces de calzada.
Cristian Quilodrán, director de la Secretaría Comunal de Planificación (SECPLA), destaca que dentro del análisis del proyecto “también se incluye el mejoramiento de áreas verdes y veredas en toda Av. El Abra, las cuales ya cumplieron su vida útil y se encuentran consolidadas solo en algunos tramos. Con esto se pretende dar mejores condiciones de circulación y seguridad a ciclistas y peatones”.
