El alcalde solicitó la presencia del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) en el lugar, para conversar con los vecinos en torno a los avistamientos y ataques denunciados por estos durante las últimas semanas, los cuales ya habrían cobrado la vida de algunos ejemplares de ganado, equino y bovino, además de generar temor entre los residentes.
“Se trata de una situación complicada, los pumas son animales salvajes que no frecuentan regularmente sectores poblados y que necesitan cazar para alimentarse, eso podría poner en peligro a los animales domésticos y a la propia gente. Ante esta problemática, solicitamos rápidamente orientación y ayuda al SAG, que nos acompañó hasta Pimpinela para conversar con los vecinos, explicar algunos temas legales, hablar sobre la biodiversidad y trabajar conjuntamente en posibles soluciones”, destacó el jefe comunal.